Indicar cuánto tarda la ley de la segunda oportunidad puede resultar algo difícil, ya que influyen elementos que están fuera de control, pero hemos decidido presentarte algunas orientaciones para que puedas entender un poco mejor el tema.
Existen distintos procesos que son importantes al momento de querer iniciar el proceso de la ley de segunda oportunidad; cada caso es importante analizarlo detalladamente y de forma independiente.
Es importante que consideres que el tiempo que tarda el mediador concursal en aceptar el cargo, no va a depender de ti.
Por esa razón, es fundamental que trates de agilizar todo aquel proceso que dependa de ti, por ejemplo, las reuniones de documentación y la contratación de un abogado.
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¿Cuándo iniciar el proceso?
Para saber cuándo conviene acogerse a la ley de la segunda oportunidad, la mejor opción es consultar a un abogado especializado, por eso vamos a darte unos detalles generales:
Factores determinantes
Si el deudor es un particular o un profesional comerciante o empresario autónomo, acogerse a la ley de la segunda oportunidad puede ser la mejor solución si pasa por una situación crítica en su economía personal y profesional que se caracteriza por lo siguiente:
- Existencia de varias deudas pendientes de pagos y que puedan ir creciendo.
- Carencia de los recursos para poder afrontarlos.
Situaciones habituales
- Tienes varios avisos judiciales por no cancelar las deudas.
- Las cuentas bancarias y bienes han sido embargados.
- Has recibido amenazas de ejecución hipotecaria.
- Has perdido tu vivienda en una ejecución hipotecaria.
- Te has visto en la necesidad de cerrar tu negocio, pero tienes deudas pendientes con Seguridad Social y Hacienda.
- Presión por parte de los proveedores para el pago de facturas.
- Llevas varios meses sin cumplir con el pago a tus trabajadores.
- Tus cuentas están en números rojos y las deudas crecen.
Estos son algunos de los ejemplos a tener en cuenta antes de iniciar un proceso de la Ley de la Segunda Oportunidad.
¿Tengo que contratar un abogado?
Si, desde el primer momento, incluso antes de iniciar el proceso, es recomendable conversar con un abogado.
Una vez decidas iniciar el proceso, es recomendable contrates un abogado desde la primera fase; y es que, difícilmente, un deudor podrá afrontar sin ayuda legal su interlocución con el notario o el mediador concursal.
Otra de las razones por las cuales contratar un abogado, es que quienes te reclaman las deudas contarán con el apoyo jurídico.
Es por eso que, si deseas librarte de algunas deudas y hacer efectiva la ley de la segunda oportunidad, debes tener el apoyo de un abogado desde el principio.
¿Cuánto tarda la Ley de segunda oportunidad?
La duración va a variar dependiendo del caso, pero como regla general se puede decir que, desde unos pocos meses en casos sencillos, hasta más de un año en casos que sean más complejos.
Quizás el tiempo te puede parecer mucho, pero cuenta con una ventaja y es que, durante el procedimiento de la Ley de Segunda Oportunidad, el deudor estará protegido, es decir, no se le podrá seguir reclamando por deudas ni se le puede embargar sus bienes.
¿De qué deudas puedo liberarme?
En este caso, te puedes librar de ciertas deudas con la Ley de la Segunda Oportunidad. Entre estas tenemos:
- Cuotas de tarjetas de créditos vencidas, pendientes por pagar a una entidad bancaria.
- Deudas que quedan con prestamistas o entidades bancarias.
- Impagos de créditos a entidades financieras online.
- Deudas por alquileres impagados.
- Deudas a proveedores (en caso de que el deudor sea profesional, empresario o comerciante)
- Deudas con particulares (socios, amigos, familiares)
- Incumplimiento de pagos de facturas telefónicas, agua, electricidad, gas, entre otros.
Conclusión
Ahora que conoces más y cuánto puede tardar la Ley de la Segunda Oportunidad, analiza tu situación, busca asesoría de un experto y da inicio al proceso si en realidad necesitas hacer uso de esta ley.
Si se cumplen los requisitos, vas a tener una posibilidad de que la deuda a la que no has podido hacer frente, ¡pueda quedar eliminada!,
Pero, por contrario, las deudas públicas tienen un régimen de eliminación mucho más compilado y por eso debes tener cuidado con ellas.