La Ley de la Segunda Oportunidad se ha convertido para muchas personas en una verdadera salida y salvación ante su delicada situación financiera.

Sin embargo, para poder acogerse a la Ley de Segunda Oportunidad y poder cancelar las deudas bajo el amparo de la Ley, negociando nuevas condiciones con los acreedores, es importante tener en cuenta que hay que cumplir una serie de requisitos.

Gracias a esta segunda oportunidad, las personas que se encuentran en una situación de sobreendeudamiento van a tener la posibilidad de pagar de acuerdo a sus posibilidades, recurriendo en última instancia a una cancelación total de las deudas o un BEPI “Beneficio de la Exoneración del Pasivo Insatisfecho”.

¿Cuánto cuesta acogerse a la Ley de la Segunda Oportunidad?

Dependiendo de la cantidad adeudada, La Ley de la Segunda Oportunidad puede suponer un coste para el deudor que puede variar, ya que normalmente la media se sitúa entre los 2.000 y 4.000 euros, pudiendo incrementarse hasta los 10.000 euros, dependiendo de variables como el número de deudores, la complejidad, bienes, etc.

¿Cuándo se aplica la Ley de Segunda Oportunidad?

La Ley de Segunda Oportunidad se aplica cuando una persona o un autónomo ha llegado por ejemplo a una situación inviable económicamente, en la que no puede hacer frente a las deudas pendientes.

Aquí es cuando se puede solicitar el amparo de esta Ley para poder cancelar un gran número de deudas y poder pagar de manera razonable y asumible las que tenga pendientes.

¿Qué cubre la Ley de Segunda Oportunidad?

Esta Ley cubre los derechos del deudor, ya se trate de una persona física o autónomo con el objetivo principal de que puedan volver a iniciar su actividad profesional, pero sin deudas que lastren de nuevo su emprendimiento empresarial con otro tipo de negocios o proyectos.

Con esta Ley se quiere cubrir sus derechos para evitar que puedan quedar fuera del sistema ante unos errores puntuales que en muchos casos son cometidos de manera involuntaria.

Además, al presentar esta Ley cumpliendo los requisitos necesarios, se logra que se paren las medidas legales que hasta el momento estaban en marcha, como embargos o confiscación de cuentas, obteniendo el afectado un tiempo muy valioso donde no se generan intereses en contra del deudor.

¿Dónde se solicita la Ley de Segunda Oportunidad?

Para poder acogerse a La Ley de Segunda Oportunidad es importante tener en cuenta que es necesario además de cumplir los requisitos, rellenar una solicitud y presentarla ante el notario pertinente en caso de que seas persona física, o bien al Registro Mercantil si se es un profesional autónomo o empresario.

En dicha solicitud se debe manifestar el mayor número de detalles posibles aportando la documentación lo más amplia y actualizada posible, como la situación personal del deudor, el patrimonio y dinero con el que se cuenta, así como detalles sobre los ingresos y deudas.

¿Cuánto tiempo dura el procedimiento de la Ley de la Segunda Oportunidad?

Al contrario de lo que inicialmente se pueda pensar, el procedimiento de La Ley de La Segunda Oportunidad es bastante rápido. Normalmente, desde que se inicia el procedimiento y se registra hasta que se llega a aprobar el acuerdo extrajudicial de los futuros pagos de la deuda, suele demorarse entre los cuatro y los siete meses de media.

Sin embargo, el saber cuánto tarda el procedimiento de la Ley de Segunda Oportunidad no siempre se adhiere a un plazo exacto, ya que en el caso de que no se logre establecer ningún acuerdo con los deudores, y no quede más remedio que solicitar una cancelación total de las deudas, es decir, el famoso BEPI.

El plazo podría demorarse unos meses más, en torno a los diez o catorce meses. Si además se acuerda un plan de pagos que debe ser comprobado periódicamente, el proceso podría alargarse fácilmente hasta cinco años más.

Y solo en el caso de quedar sometido a un plan de pagos habrá un proceso posterior de vigilancia de su cumplimiento, que durará otros 5 años.